Agujeros

Agujeros. La vida las provoca a veces. Son rotos, grietas, heridas  causados por el dolor dejado por experiencias muy duras. Duelen tanto que desesperadamente se busca llenarlos, taparlos, enterrarlos. No puedes actuar como si no los vieras. No debes callar tu dolor. Tal vez los escondes con tu mejor sonrisa, con una actitud de estar en control y feliz. ¿Te suena familiar? ¿Cuales son tus agujeros del alma? ¿Con qué las has llenado? Si ha sido con placeres de este mundo, con rencor, con orgullo, con conductas destructivas,  los cubriste con arena. Cuando soplen vientos fuertes quedarán al descubierto y notarás tu y los que te rodean que están más grandes y te han cambiado más que antes. ¡Esas grietas hay que sellarlas para siempre! Debes reconocer que la arena no es eficiente; la vida que llevas no te ha quitado el dolor. Hay uno, solo uno que puede llenar los agujeros de tu alma; se llama Jesùs. Su amor penetra hasta lo más profundo de tu ser. Su Sangre sella, te cubre, te sana, te restaura, te limpia. Solo Jesús puede ocupar cada grieta y herida que puedas tener. El que se rìe de ti y de tus agujeros lo sabe. Por eso se esmera en que tu dolor crezca y tu conducta te aleje de Dios. Los vientos siempre soplan y seguirán soplando, tormentas se avecinan. Pero si tu tienes a Jesùs, ninguna tormenta de destruirá. Si le pides a Jesùs que entre en tu corazòn, lo reconoces como tu Salvador y te arrepientes de tus pecados, El toma la pizarra de tu vida y la borra; te entrega una en blanco. ¿Te puedes imaginar la oportunidad de empezar en cero? Entonces naces de nuevo y las cosas viejas pasaron, y todas son hechas nuevas. 2 Corintios 5:17- "17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es ; las cosas viejas pasaron; he aquí, son hechas nuevas."
¡Que hermosa muestra de amor! Hoy puede ser el dìa en que Dios sane tu inmenso dolor, borre tu pasado, y llene los vacìos de tu vida. Todo empieza reconociendo que ya no puedes ser igual y una simple decisiòn. Dios te bendiga. Dios te ama.
Hebreos 9:14 "¿cuánto más la sangre de Cristo, el cual por el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, purificará vuestra conciencia de obras muertas para servir al Dios vivo?"