viernes, 6 de enero de 2017

Provisión en el desierto

4 de enero de 2016
Provisión en el Desierto
Te has preguntado:
¿Amo a Dios pero: Porqué no me siento como antes?
La naturaleza del ser humano quiere huír en medio de los problemas, pero muchas veces cuando la gente huye, acaba en el desierto. Agar  huyó al desierto pero un ángel le habló allí, le dio promesa y un pozo de agua para no morir. Moises huyó al desierto y Dios le cuidó a el y al pueblo de Dios largo tiempo. ¿A dónde  huyeron? Al desierto. Apocalipsis 12:6 habla de una mujer (representa el pueblo de Dios) que huye al desierto de un dragon (Satanás), y dice el texto: " Y la mujer huyó al desierto, donde tiene lugar preparado por Dios, para que aquí la sustenten por 1260 días."  ¡¡Podemos concluir que el pueblo de Dios tiene un gran banquete reservado en el desierto porque un lugar preparado por Dios para  sustentarte tiene que ser algo grande!!  Que gran alivio sentir a Dios en el desierto. Los hijos de Dios están siendo atacados cómo nunca, mucha gente no se siente como antes. Observa lo que dice el versìculo 17 del mismo capítulo: "Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo." En el desierto hay una gran guerra que enfrentar y muchas veces será contigo mismo. Es tiempo de abrir los ojos.Tu sabes quién eres y quien te llamó. Pero si en el dolor de las heridas que también se recibes en el desierto se te olvida, dejarás de sentirte parte del cuerpo de Dios. Dejarás de sentirte útil, valorado, eficiente, amado.
En éste caminar, hay que aprender a abrocharse el cinturón cuando Dios te da alguna palabra profética, de bendición o instrucciones. Conjuntamente con estos, viene la oposición del enemigo a tratar de impedirlo. Manente firme, ora y espera en el Señor. Lo que Dios regala,  Dios respalda.  Confía:  "Hay provision para los hijos de Dios en los desiertos."  Dios quiere demostrar su poder exactamente donde hemos experimentado dolor, en el desierto.

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