sábado, 7 de noviembre de 2015

Limpia Tu Casa

Mientras limpio mi casa pienso en esta anècdota. Una amiga me contaba la manera en la cual su hija barría la casa. Acumulaba la basura y la metía debajo de una alfombra que tenía el comedor. Un dìa aquella madre viò un pequeño bulto que se formaba debajo de la alfombra y no le prestó atención. Al tiempo el bulto se convirtiò en  una gran montaña de basura acumulada y muy dificil de despegar. Hay ocasiones en que trataràs de ocultar la basura de tu vida donde nadie la vea. Pensaràs que al guardarla y no pensar en ella no te lastimarà màs...pero tan solo se està acumulando y se forma tremendo volcán. Son tus heridas, tus traumas y temores. Son aquellas cosas que has tratado de sacar de tu vida y te sientes debil para lograrlo. La basura de pensamientos destructivos, fracasos, enojo, depresiòn y culpa. Estas cosas no se sanan bajo la alfombra sobre el suelo. Se sanan en las alturas, en la presencia de Jesùs. ¿Hay presencia de Jesùs en tu vida? No hablo de: "Dios sabe que lo amo y El me ama." ¡Hablo de relaciòn, bùsqueda y entrega total.! HABLO DE BUSCAR LA ESCOBA Y EL RECOGEDOR Y PONERLO EN LAS MANOS DEL SEÑOR DICIÉNDOLE: "¡BARRE CON TODO, LIMPIA MI CASA, MI VIDA, MI ALMA PORQUE YA NO PUEDO MÁS!" Hay cosas que solo la Sangre de Cristo limpia. Dile a Jesùs que entre a tu casa hoy, que alumbre la basura oculta con una luz potente y se lleve hasta la alfombra que la cubre. En la  verdadera limpieza y libertad, no necesitaràs nada que oculte la basura que sencillamente ya no està. En la oscuridad el polvo permanece y florece, pero en la luz correcta es que se  puede ver y se limpia bien.  Juan 1:7-Pero si andamos en la Luz, como El está en la Luz, tenemos comunión los unos con los otros, y la sangre de Jesús Su Hijo nos limpia de todo pecado.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario